16 Dinámicas de confianza

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Hoy vamos con unas dinámicas de confianza. A ver, no quiero decir que sean unas dinámicas que llevan tanto tiempo con nosotros que ya son de confianza. Quiero decir que nos van a servir para adquirir confianza entre los miembros del grupo.

Bromas aparte las dinámicas grupales de confianza nos vienen muy bien para empezar a unir y cohesionar a nuestro grupo. Y, como siempre en este blog, esperamos que te resulten divertidas.

¿Qué son las dinámicas de confianza?

Las dinámicas de confianza son muy importantes para fomentar la cohesión y la participación de todos los miembros del grupo. Para comenzar a usar estas dinámicas resulta casi imprescindible que los miembros del grupo se conozcan entre sí y exista cierta conexión entre ellos.

Aquí por tanto no vas a encontrar dinámicas de autoconfianza, para eso existen otro tipo de actividades, aunque si fallan no debemos tener problemas en acudir a profesionales como los de Psicología Zaragoza.

Y ahora si, vamos con algunos de estos juegos de confianza.

1 Mirarse a los ojos es fundamental en estas actividades para fomentar la confianza grupal

Mira en este vídeo como sería este juego de confianza:

De los mejores juegos de confianza: el espejo

Tienes que organizar a tu grupo por parejas. NO dejes que sean ellos los que se pongan por parejas. Al final siempre se ponen juntos los que ya se conocían de antemano y ese no es nuestro objetivo.

Selecciónalos tu directamente o usa el azar. O haces dos filas, una enfrente de la otra y ya tienes las parejas.

Si ya tienes resuelto el tema que se distribuyan por la sala en parejas. En esta dinámica uno hace de guía y otro le sigue.

Tienen que mirarse a los ojos en todo momento. Si, ya se que al principio es un corte. Precisamente se hace por eso, para superar esa barrera inicial.

La persona que hace de guía tiene que hacer movimientos, los que quiera. Tanto en su mismo espacio como desplazándose por la sala.

El que le sigue tiene que hacer precisamente eso: seguírle. imitar todos sus movimientos durante un rato.

No es una dinámica muy complicada. Cuando detectes que se van cansando les haces parar. Es el momento de cambiar de roles.

El que era guía ahora sigue al nuevo guía. Cada uno sigue con su pareja y juegan a imitarse los movimientos.

Creo importante recalcar que en todo momentos las parejas han de tener contacto visual.

Cuando creas que es suficiente, ya puedes parar. Seguro que muchos participante te lo agradecerán. Y es normal, a todos nos cuesta este primer acercamiento.


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Te presento dinámicas de todo tipo organizadas en cinco sesiones temáticas:
Presentación
Confianza y comunicación
Colaboración
Creatividad
Emoción y evaluación

2 Una variante para seguir fomentando la confianza entre los miembros del grupo


No pierdas de vista a tu pareja, pase lo que pase, esta es una dinámica de confianza

Seguimos con las mismas parejas por que vamos a darle una pequeña vuelta de tuerca a esta dinámica grupal divertida.

Ahora las parejas no pueden estar quietas, el guía debe intentar perder de vista a su compañero. Debe interponer entre su pareja y el a otras personas.

El que sigue al guía debe hacer todo lo posible para que no haya nadie entre el  y su pareja.

El contacto visual no se debe perder en ningún momento. Esa es la norma fundamental en el juego.

La otra es que no se puede correr, la seguridad es lo primero.

Ya verás como desde fuera el baile resultante se ve muy divertido.

Cuando creas que ya es suficiente viene el cambio de roles, el que era guía pasa a seguidor y viceversa.

El objetivo y la mecánica siguen siendo las mismas.

Cuando decidas acabar la actividad puedes culminarla con una puesta en común de los sucedido y de como ha evolucionado el grupo.

Seguro que si al principio os costaba mucho trabajo sostener la mirada en la segunda parte del juego, todo era mucho más sencillo. Además os habéis empezado a divertir.

Mira en el vídeo como se juega exactamente:

En la primera dinámica, mucha gente deseaba acabar y la segunda parte se ha hecho mucho más corta.

3 Juego de confianza el pasillo

El objetivo de las dinámicas de confianza es que los miembros del grupo confíen los unos en los otros. Que sepan que, al trabajar para lograr los objetivos, sean los que sean, todos van en la misma dirección.

En esta pequeña actividad hacemos un pasillo con todos los participantes menos uno. Las dos filas de personas una frente a otra y con los brazos extendidos. La persona que sobra, que ahora está en la cabecera de las dos filas, preparado para pasar, debe coger bien. Cuando este empieza a correr, los demás levantan los brazos a su paso, con cuidado de no pegarle en la cara claro. Todos deben pasar por el pasillo.

La segunda parte de la actividad sería hacerlo con los ojos cerrados, los chicos deben saber que los demás cumplen con su cometido aunque no los vean.

4 Caer de espaldas, el clásico de las técnicas de confianza

Juegos de confianza
Este puede ser el mejor juego de confianza dentro de un grupo

En esta dinámica iremos poco a poco. Las prisas no son buenas y queremos evitar accidentes, por eso las parejas deben dejar poco espacio entre ellos al principio. Cuando todos están listos daremos la orden: la persona de delante debe dejarse caer hacia atrás, donde su compañero la espera. No debe dejar que caiga al suelo, le sujetará por los hombros y volverá a ponerlo derecho.

El dinamizador observará que todos los que se dejan caer ponen el cuerpo recto y que solo el talón toca el suelo. A medida que la gente va cogiendo confianza, vamos aumentando la distancia de seguridad.

Cambio de rol en el juego

Una vez que vemos que todos se van acercando más al suelo podemos cambiar de rol. El que sujetaba por la espalda pasa así a tener que confiar en su compañero. El facilitador debe esta atento a que todos lo hagan en la medida de sus posibilidades. Puede que haya alguien con miedos insuperables. ¿Que tal si eres tu entonces el que sujetas por la espalda?. Seguro que eso le da más confianza.

Podemos complicar un poco la actividad si cuando se van aburriendo empiezan a hacerlo con los ojos cerrados. Igual, poco a poco y cambiando de rol después. También podemos hacer un cambio de parejas. Si nuestro objetivo es cohesionar un grupo, la amistad debe de ser entre todos. Hay que entrelazar relaciones.

Para esta actividad de confianza valen casi todas las edades, pero si tienes que vigilar más si hablamos de un grupo con personas mayores o muy jóvenes. Las circunstancias personales también han de ser analizadas. No te la juegues si no lo ves claro.

Para seguir creando el clima de confianza entre los miembros del equipo, el siguiente paso lógico es lanzarnos al vacío…

5 Dinámica de confianza y cohesión lanzándose al vacio

Como colofón a estas dinámicas podemos hacer que el grupo, por parejas, se sostengan unos a otros. Cada miembro de la pareja da la espalda al otro. Luego se deja caer, con el cuerpo recto y los ojos cerrados, hacia atrás. El compañero debe dejarle caer un instante y luego sostenerle por la espalda para que no caiga al suelo.

Pero hay que hacerlo poco a poco. Cuando estén más seguros del juego, se puede dejar caer un poco más, para que la sensación de vértigo sea mayor. Cuando se cansen, se cambia de rol cada miembro de la pareja.

Pero además podemos poner en práctica todo lo aprendido con una actividad que va un poco más allá. Necesitas una mesa. El primer voluntario se sube en ella y se pone de espaldas, como para caer al suelo.

El grupo forma dos filas que se miran la una a la otra y entrelazan las manos.

Cuando todos están listos, el voluntario se lanza al vacío de espaldas, con el cuerpo recto y los ojos cerrados. Tal como ha hecho antes de uno en uno.

Los demás deben sostenerle para que no caiga. Pero seguro que lo entiendes mejor en el siguiente vídeo que te he preparado:

Ya que estamos te voy a contar otra dinámica grupal de confianza.

6 Dinámica de confianza grupal en círculos concéntricos

Yo uso esta dinámica justo después de una cualquiera de presentación. Digamos que nos vale para reforzar los nombres y empezar a adquirir confianza entre los miembros del grupo.

Para esta dinámica necesitas hacer dos círculos concentricos. Deben ser iguales en número de personas. No hace falta que estén cogidos de las manos.

Además han de estar frente a frente, mirándose a la cara.

A tu señal los miembros del grupo empiezan a contarse su vida. El objetivo es conocerse un poco más. Trabajos, aficiones, mascotas… Cualquier tema vale.

Se lo cuentas aquellos que están uno enfrente del otro. Si el guirigay de todos hablando a la vez es considerable. Que remedio.

Puedes darles un minuto para hablar de tu vida. Vuelves a hacer la señal convenida y el circulo exterior debe avanzar en el sentido de las agujas del reloj y correr una posición.

Ahora cada uno debe estar enfrente de otra persona. La mecánica es la misma de antes. Hay que contarse la vida para empezar a conocerse unos a otros.

El juego se acaba cuando ya se ha dado la vuelta completamente y vuelven a coincidir los mismos del principio.

Ah, también puede pasar que el grupo sea impar. Puedes optar entonces por unirte al grupo o que el circulo de fuera sea más grande que el de dentro.

Así siempre habrá una persona que no tenga a nadie enfrente pero es un mal menor. La dinámica funciona igual.

Seguimos con otro juego de confianza.

7 El bingo. Conociendo a las personas con un juego divertido

El objetivo es parecido al anterior: conocerse un poco más.

Tenemos que tener las cartulinas del bingo ya preparadas. No van a ser unos cartones al uso. NO llevan números.

Se trata de unos cuadrantes donde debes haber escrito cosas que las personas pueden tener en común. Por ejemplo:

  • Tiene mascota.
  • Le gusta viajar.
  • Sabe tocar un instrumento.
  • Le gusta la comida exótica

Usa la imaginación. También puedes poner alguna más difícil para que no la cumplan todos.

Cada persona debe tener uno de estos cartones ( pueden ser fotocopias) y algo para escribir.

Cuando das la salida cada persona debe empezar a preguntar a los demás para poder rellenar su cartón. Debes poner alguna norma para ordenar el juego:

  1. Solo se pueden hacer preguntas a una persona a la vez. No valen tríos ni cuartetos.
  2. Solo se pueden hacer tres preguntas (por ejemplo) a cada persona.
  3. A cada coincidencia se pone el nombre en la casilla correspondiente.

Es decir, si estás entrevistando a Fran y a este le gusta viajar, pon su nombre en la casilla correspondiente.

Cuando le hagas las tres preguntas, cambias de pareja.

Puedes poner un tiempo o dejar que alguien cante bingo. Comprobáis los resultados y acaba el juego.

8 La manta, confianza y cohesión

Necesitas una manta o tela que no sea muy translucida. Que al menos no se conozca bien a las personas que hay detrás. También dos sillas.

Vamos a poner las dos sillas una enfrente de la otra, con la distancia suficiente para poner la manta entre ellas como si fuera una pared divisoria. Además que las personas que se sienten estén agusto y no se den con las rodillas.

Hay que hacer dos equipos. Si somos impares da igual, un equipo con un jugador más no va a marcar la diferencia.

Puedes hacer tu los equipos numerando a los jugadores, eligiéndolos a dedo o usando este sistema con globos:

Necesitas otro monitor que te ayude a levantar la manta entre los dos equipos. Estos deben colocarse detrás de sus respectivas sillas, seguramente tendrán que agazaparse para que no se vean y el juego se desarrolle bien.

El juego consiste en que un representante de cada equipo se sienta en la silla, con la manta subida, y espera a que esta baje. En ese momento el que diga el nombre del otro primero gana.

A continuación se levantan los dos, la manta vuelve a subir y se sientan dos nuevos jugadores. Se vuelve a repetir la mecánica del juego.

¿A que es super sencillo?.  Además tiene que ser suficientemente rápido y es más divertido.

Puedes llevar un marcador o ir eliminando jugadores. O simplemente que vayan jugando hasta  que veas que se van cansando.

Mira en el vídeo como queda en la práctica esta dinámica de grupo de confianza:

Dinámica de conocimiento y confianza

Este juego también vale como rompehielos. Lo que está claro es que sirve mucho como refuerzo en el conocimiento de los nombres de los miembros de nuestro grupo.

Además puedes usarla para resolver algún conflicto que hayas detectado. Siempre puedes poner a los protagonistas del problema en el mismo equipo para que trabajen juntos.

9 Dividiendo en grupos de trabajo sin que se note mucho

Estamos hablando de crear un clima de confianza en el grupo pero además los vamos a dividir, sin que se den cuenta en equipos de trabajo para seguir cohesionando.

Por que hacemos esto?. Puede ser por que vais a trabajar a continuación en algún proyecto por equipos. Por que vas a seguir dinamizando con algunos juegos cooperativos o de competición. Por que cada equipo se va a ir a una actividad distinta y quieres que la división sea aleatoria. Y por que no quieres que los participantes se encallen en sus relaciones actuales, que se relacionen con más personas, que se abran a nuevas amistades.

Materiales necesarios para esta dinámica de confianza

Vamos a necesitar globos de colores. Pero no de forma aleatoria, vamos a pensar un poco. También nos vendría bien un equipo de música para amenizar más todavía el taller.

Vamos a pensar entonces en cuantos grupos necesitamos y dividimos el número total de participantes. Ese es el número de colores que necesitamos.

Por ejemplo, tenemos que hacer 4 equipos y es un grupo de 16 personas. Salen a 4 personas por equipo. Vamos a meter cuatro colores y cuatro globos por cada color.

Echa esta operación, empiezas a repartir los globos, uno a cada persona. Además les das un rotulador a cada uno.

Empezamos plasmando la personalidad de cada uno en el globo

Bueno, esto es un poco pretencioso. Les explicas que dibujen en el globo lo que quieran. Pero además tienen que pensar en lo que van a dibujar. Es que luego lo tienen que explicar. Así que es mejor que sea una cosa con cierto sentido.

Les das un tiempo y cuando estén todos los dibujos, sigues explicando.

Al toque de tu silbato, o cuando la música empieza a sonar, los globos deben de ser lanzados al aire. La única norma es que no toquen el suelo.

Los globos deben estar siempre en el aire. Ni en las manos ni en el suelo.

Cuando quieras paras la música, o tocas el silbato de nuevo, ya todos deben de detenerse y tener un globo en la mano.

Cada globo tiene un dibujo, hay que buscar al “artista”. Los participantes deben empezar a buscar al dueño inicial del globo que tienen en la mano. Una vez que le encuentren pueden empezar a conocerse un poco.

Un buen tema para iniciar la conversación es el dibujo del globo. Por que se ha dibujado eso, si se identifica, etc.

De ahí hay que pasar a recordar el nombre, a que nos dedicamos, las aficiones, por que estamos aquí. Que vaya fluyendo la comunicación.

Puede que se formen tríos por la propia dinámica de la actividad. Uno va buscando a un dueño de globo pero no le encuentra y ve su globo en manos de otra persona que ya está hablando con otro… y se engancha con ellos. Que vaya fluyendo la comunicación.

Puedes dejarlos hablar dos o tres minutos, después…

Que suene de nuevo la música y seguimos con el juego de confianza

Y esto hay que hacerlo tres o cuatro veces. Que cada persona conozca a otras tres o cuatro. Como siempre tu tienes que medir tus tiempos y saber leer al grupo que tienes encomendado.

Por cierto, la actividad puede perfectamente terminar aquí. Ya habremos conseguido cumplir un pequeño objetivo: que se conozcan un poco más y adquieran algo de confianza entre ellos.

Pero como hemos dicho antes, todavía podemos aprovechar los globos y la preparación previa, para dividirlos en equipos de trabajo.

División del grupo en equipos

Que pare definitivamente la música, vamos a empezar la división por equipos.

Que vuelvan al circulo, cada uno con un globo en la mano. No su globo, el que les haya tocado en suerte.

Ahora debes pedirles que se agrupen según el color del globo que tienen en la mano.

Si lo has preparado bien ahora tenemos cuatro grupos divididos aleatoriamente. Lo has logrado sin esfuerzo y sin que se note. Ahora bien, puede que necesites hacer alguna corrección.

Modificando los grupos según la actividad posterior

Según lo que necesites hacer ahora con estos equipos, puedes decidir modificar algo. Por ejemplo.

  • Vas a hacer un juego competitivo y la fuerza, la altura, la destreza o la edad pueden ser determinantes. Si todos los fuertes están en el mismo grupo, no te va a gustar el resultado.
  • Es un proyecto de trabajo en equipo, en plan team building. En un grupo hay dos líderes y en otro ninguno.
  • Es un campamento con  niños y te interesa juntar a dos chavales por algo especifico.

Hay más motivos, tu lo debes de valorar. En estos casos, no pasa nada por reformar los grupos y hagas cambios para que tus siguientes actividades salgan bien. Recuerda que eres el responsable de la buena marcha del grupo.

10 Sonidos de animales

Con esta actividad se pretende crear un entorno de trabajo distendido mientras se van conociendo más a fondo los participantes entre ellos.

Se van a necesitar unos 20 minutos para hacer esta actividad, aunque, como ya hemos comentado con otras dinámicas, cuanto más miembros más tiempo se requerirá.

El lugar en el que se va a realizar la actividad debe ser lo suficientemente grande como para que se puedan sentar en círculo, en caso de que sea un grupo grande, o bien en fila, en caso de que sea pequeño.

En cuanto a materiales, vamos a necesitar hexágonos, uno por subgrupo, cortados en seis trozos, y bolígrafos.

Desarrolla el juego de confianza

Esta dinámica es muy recomendable para trabajar con grupos recientemente formados, pues servirá para que sus miembros se conozcan un poco más a fondo mientras disfrutan de un rato divertido.

El encargado de dirigir la dinámica lo introducirá como una actividad de presentación, con el objetivo de que cada uno se aprenda los nombres de sus compañeros.

El primero en comenzar será el propio dinamizador, diciendo su nombre e imitando el ruido de un animal. Por poner un ejemplo: me llamo Nahum y “guau-guau”.

A continuación, la siguiente persona de la fila o del círculo se presentará, añadirá el sonido del animal que le guste y, también tendrá que repetir el de su compañero anterior. Por ejemplo: Él se llama Nahum y “guau-guau” y yo me llamo María y “miau”. De esta manera, la lista de nombres y ruidos será, cada vez, mayor.

Si una persona se equivoca, todo el grupo deberá empezar desde el principio. Así, los participantes harán el esfuerzo de aprenderse los nombres a la vez que asocian las caras de los participantes con un ruido característico, que al ser gracioso ayuda a destensar los primeros momentos de la formación de un grupo.

11 Trenes locos

Con este juego se pretende fomentar la confianza entre compañeros, haciendo una actividad dinámica y amena.

El tiempo necesario es de unos 30 minutos aproximadamente y se puede trabajar con grupos de tamaños variados, pero que después serán divididos en grupos de 4 a 5 personas.

Para realizar esta actividad lo más recomendable es hacerla al aire libre, y se va a necesitar de material unas vendas para tapar los ojos.

Desarrollo

El dinamizador formará grupos de 4 a 5 personas y les dará a cada uno de ellos vendas, pero solo las necesarias para que uno de los miembros del grupo se quede sin.

Antes de ponerse las vendas se explicará en qué consiste la actividad. Deberán formar un tren en el que, sin hablar, consigan llegar a la estación, estación la cual puede ser un lugar cualquiera elegido por el dinamizador.

Antes de que el tren se ponga en marcha, se les dará unos minutos para que puedan elaborar una estrategia de trabajo conjunto. Todos se ponen en fila y se ponen las vendas menos el que no la tiene, quien será el último vagón del tren y será el encargado de guiar al resto.

El dinamizador irá indicando qué tren debe empezar la actividad. El resto de compañeros los observan, sin comentar nada, para evitar sesgar a sus compañeros. Luego irán saliendo los demás trenes.

Cuando todos los grupos hayan hecho la actividad, se procederá a reflexionar en grupo cuál ha sido la estrategia de cada grupo, qué creen que puede haberles hecho funcionar y qué no.

12 El viento y el árbol

Una persona, en el centro del círculo, se deja bambolear de uno a otro, como las ramas de un árbol mecidas por el viento.

 Desarrollo:

Hacemos grupos más pequeñas, como de cuatro personas. Un participante en cada grupo se sitúa en el centro y cierra los ojos. Sus brazos penden a lo largo de su cuerpo y se mantiene totalmente derecho, para no caerse. El resto de los participantes, que forman un círculo a su alrededor, le hacen ir de un lado para otro, empujándole y recibiéndole con las manos. Al final del ejercicio es importante volver a la persona en posición vertical, antes de abrir los ojos.

13 Las estatuas

Queremos seguir favoreciendo la confianza, la cooperación y la cohesión entre los miembros del grupo.

Desarrollo

  1. Se formarán parejas de manera aleatoria con el objetivo de que les toque trabajar de manera conjunta a personas que no se conozcan mucho entre sí.
  2. Una de ellas adoptará el rol de estatua y el otro, deberá taparse los ojos con una venda.
  3. Cuando ya se los haya tapado, el que hace de estatua tomará una postura. Su compañero, deberá tocarlo con el objetivo de adivinar la postura que ha tomado y, posteriormente, imitarlo.
  4. Lo imitará sin que su compañero quite la postura y cuando crea haber terminado, el facilitador le quitará la venda de los ojos para que por sí mismo pueda comparar el resultado.
  5. Se repite el ejercicio, pero cambiando de roles.

Al final de la actividad podemos hacer una evaluación preguntando a las parejas qué rol les ha parecido más fácil, si se han sentido cómodos con el contacto físico entre compañeros, etc.

Variación

En vez de por parejas, hacerlo por pequeños grupos (de 3 o 4 personas) y que solo uno haga de estatua. Así, los demás pueden hablar entre ellos y comentar. De esta manera, la comunicación sería otra dimensión que se tendría en cuenta en la evaluación.

14 Semejantes

Vamos a crear un clima adecuado de trabajo en el que haya los integrantes muestren confianza por sus compañeros. Necesitaremos folios y bolígrafos (uno por cada participante).

Pasos a seguir:

La persona que sea la encargada de dirigir la actividad, repartirá los materiales a todos los integrantes del grupo y les pedirá que piensen en alguien de ese mismo grupo con el que compartan semejanzas.

Pasados unos minutos y que todo el mundo haya completado la actividad, el dinamizador pedirá un voluntario que debe contar qué compañero/a le parece semejante a sí mismo.

Cuando haya descrito los motivos, el resto del grupo opinará si creen acertada la opinión y cuáles son sus motivos.

Después, los integrantes del grupo, expondrán sus razones.

15 Pies atados

Este juego de confianza nos gusta porque, además de ser una dinámica que trabaja la cohesión de grupo, os asegura unas buenas risas, tanto por parte de los participantes como del que dirige y además ¡es adaptable a todas las edades!

La actividad consiste en hacer parejas y atarles el tobillo izquierdo de una de ellas con el tobillo derecho de la otra para que tengan que ponerse de acuerdo para caminar. La idea es que, a medida que avanza el juego, (y dependiendo de la edad también) las parejas se vayan uniendo entre sí hasta conseguir una hilera enorme con todos los participantes. La persona que dirige la dinámica debe dar las indicaciones y complicarlas cada vez más: caminar hacia delante, detrás, más deprisa, más lento o ¡sin hablar!

Confianza, cohesión grupal, trabajo cooperativo y …. RISAS. Poco más se puede pedir.

16 Escalar en el aire

Vamos a construir la ilusión de que una persona camina o hace otras actividades en el aire, con la ayuda de sus compañeros claro.

Vamos a escoger a un usuario nosotros mismos, para el ejemplo elegiremos a alguien que no pese mucho. Su misión consiste en caminar a cámara lenta en el aire. Todos los compañeros han de ayudarle dejando que pose sus pies en sus manos, sujetando la cintura, cogiendo las manos… Todo lo necesario para que el compañero camine en el aire sin peligros.

Cuando todo funciona puedes pasar a pedir un voluntario y pedirle que realice otra actividad.

Más dinámicas grupales divertidas

Mira estos vídeos y enlaces con más dinámicas de confianza para empezar a cohesionar tu grupo seleccionadas:

Y de momento nada más, espero que este artículo sobre las dinámicas de confianza y cohesión para tu grupo te haya entretenido e ilustrado un poco. Que hayas recordado buenas actividades para tus próximas actividades. No pretendo mucho más. Muchas gracias por haber llegado hasta aquí y sigue leyendo este blog sobre dinámicas de grupo, actividades al aire libre, risoterapia, team building y viajes chulos.


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